Nada como contemplar un hermoso jardín de flores frescas y dejar que todo nuestros sentidos vuelen a su libre albedrio, disfrutando de estas maravillosas sensaciones que nos proporcionan estos hermosos milagros de la naturaleza. Este jardin es mi regalo para ti mujer emprendedora.

Sin embargo casi nunca nos detenemos para contemplarnos a nosotras mismas y vernos hacia adentro, para sentir las pulsaciones de nuestro corazón, para ver el color de nuestros ojos, la forma de nuestras manos o tocar con suavidad cada parte de nuestro cuerpo. – lo hiciste alguna vez – Sin duda alguna, también somos un increíble y maravilloso milagro de la vida, de este infinito universo o para muchas una perfecta creación de un dios supremo. Somos como me decía con frecuencia mi padre, pequeñas estrellas viendo a otras estrellas del firmamento. Es obvio que todos los seres humanos tenemos los mismos componentes que tiene nuestro cosmos. Somos únicas/os e irrepetibles.

En este acelerado mundo cada vez más globalizado e híper-conectado, son pocos los minutos que tenemos para nosotras mismas, para poder contemplarnos, para poder prestarnos atención y sentirnos especiales, es poco el tiempo que nos queda para disfrutar esos pequeños y grandes detalles de la vida. Gran parte de nosotras estamos más pendientes de las novedades de nuestro blackberry, del mensaje o la llamada del celular y nos vamos perdiendo en esta gran vorágine de lo urgente, de los pagos, de nuestras tarjetas de crédito, de nuestros saldos a favor o casi siempre en contra. Dejándonos llevar por un mundo de imágenes, de tendencias, de modas, de luces y taladrante ruido citadino.

Ahora te invito a regalarte unos minutos y respirar profundamente y mirarte hacia adentro, a realizar mentalmente o si prefieres toma un papel y escribe, tus increíbles saldos a favor como persona, de tus increíbles capitales acumulados a lo largo de tu vida. Generalmente se creé que el capital está ligado solo al dinero o a la cantidad de bienes que tengamos, en parte es cierto; sin embargo existen también otras valiosas ganancias que los seres humanos vamos adquiriendo en nuestras vidas y que a diferencia del dinero, siempre serán nuestros grandes aliados. Aquí les comparto alguno de los muchos que tú tienes.

– Capital de valores: Son ellos los que guían nuestros pasos y nos permite ser cada vez mejores personas
– Capital profesional: son los conocimientos y las capacidades que hemos adquirido por medio de la educación y de experiencias laborales.
– Capital social: El círculo de amistades, compañeros de trabajo, amistades online, que tenemos y la gran capacidad de mantenerlas y prestarles atención.
– Capital emocional: primeramente tiene que ver con nuestra autoestima, que nos permite tener seguridad y confianza en nosotras mismas y por ende la capacidad de tener siempre la mente y nuestro estado emocional en positivo, listo para enfrentar las diversas dificultades y retos proactivamente.
– Capital creativo: nuestra capacidad de innovar, crear nuevos servicios o productos o nuevas formas de hacer las cosas
– Capital de poder: la capacidad de diversificarnos, de compartir espacios y ayudar a crecer y avanzar a otras personas.

Como puedes ver, tienes muchos saldos y capitales a favor y en constante crecimiento, si se cotizaran en la bolsa, tendrías millones a tu favor en efectivo, debes sentirte orgullosa por tantos logros. Sin embargo es bueno saber qué son mucho más trascendentes que el dinero y que no están sujetos a las variaciones de un mercado monetario tan inestable. Estos capitales estarán de tu lado siempre, pero es importante analizarte honestamente para saber que tanto acumulaste en cada uno de estos pilares de tu crecimiento personal, con el fin de mejorar y potenciar los que faltan, así lograr ser una mujer emprendedora más completa, diversa y maravillosa como estas flores que hoy te regalo.

Desde este lado de la mágica bruma

Tus amigas de