Te es conocido estos pasajes de la vida diaria “no sé dónde puse las llaves, mis lentes, las tarjetas, los recibos, etc” la lista es interminable. En los recientes talleres de Life coaching y reuniones con amigas, uno de los temas de conversación y de preguntas frecuentes, es todo lo relacionado a los problemas con la concentración, los olvidos, el no recordar donde pusimos objetos de uso frecuente, el quedarnos sin poder decir ese nombre o palabra que no sale fácil. De hecho te paso a ti en algún momento, a mí me suele suceder y confieso que me genera estrés, pérdida de tiempo y a veces algunos conflictos conmigo misma y mi entorno.
Pensado en ello y de cómo fortalecer nuestra capacidad de concentración y agudeza mental, busque en el vasto mundo online, algunas estrategias que nos puede ayudar a fortalecer nuestro cerebro y evitar estas situaciones que nos traen malos ratos, así como alejar de nuestra vida al temible mal de Alzheimer. Bingo entre tantos, encontré este artículo del famoso Coach Tony Robbins, el mismo que se los comparto ahora. Tomen nota de sus útiles y fáciles consejos y a ponerlos en práctica, de hecho tendremos importantes cambios y mejoras. Yo empecé a ponerme en ACCIÓN.
Sé más inteligente
Tenemos la tendencia a pensar que la pérdida de la agudeza mental es sólo una parte del proceso de envejecimiento, pero la edad no es el único factor que contribuye al deterioro cognitivo. Nuestro estilo de vida también juega un papel clave. La mala alimentación, la falta de sueño y ejercicio, el estrés continuo, el tabaquismo y los contaminantes ambientales, todos ellos dañan las frágiles células del cerebro.
Afortunadamente, el deterioro mental no es irreversible. De hecho, el cerebro es increíblemente dinámico y tiene el potencial y la capacidad de cambiar en cualquier momento a lo largo de nuestra vida. Tú tienes el poder para mejorar tu función cerebral, proteger tu cerebro de los daños y contrarrestar los efectos del envejecimiento. Todo se reduce a tus decisiones cotidianas.
Aquí tienes 5 pequeños cambios que puedes hacer en tu vida y que marcarán grandes diferencias en tus capacidades cognitivas:
CONSUMIR MÁS GRASA SANA
Los ácidos grasos omega-3, que se encuentran en alimentos como el salmón, las nueces y semillas de lino, ofrecen una serie de beneficios para la salud, tales como mejorar el rendimiento cognitivo y el estado de ánimo así como ayuda a evitar los trastornos mentales.
Apoyan la plasticidad del cerebro que es la capacidad del cerebro para cambiar la respuesta a las demandas de estimulación que se le plantean, lo que podría aumentar la desarrollo de varias moléculas relacionadas con el aprendizaje y la memoria.
En uno de los estudios más grandes de este tipo, los investigadores analizaron las dietas de 12.000 mujeres embarazadas y encontraron que los niños que consumían la menor cantidad de ácidos grasos como el omega-3 eran un 48% más propensos a marcar en el cuartil más bajo en pruebas de inteligencia. Y en un estudio similar, 396 niños entre las edades de 6 y 12 años a los que se les dio una bebida con ácidos grasos de omega-3 mostraron puntuaciones más altas en las pruebas que miden la inteligencia verbal, el aprendizaje y la memoria después de 18 meses de consume frente a un grupo de control de estudiantes que no habian tomado esa bebida.
TOMAR UN TÉ VERDE
Es una fuente rica de antioxidantes, nutrientes y minerales. El té verde es bien conocido por su capacidad para proteger el cuerpo contra los radicales libres y por su poder para aumentar la quema de grasa y aumentar la tasa metabólica del cuerpo. ¿Pero sabes cuál es su potencial para mejorar la función cognitiva y en particular aumentar la memoria de trabajo?
En un estudio de 2014, los investigadores trabajaron con 12 voluntarios sanos, unos consumían un refresco a base de suero que contenía 27,5 gramos de extracto de té verde, y otros una bebida similar pero sin el té verde. A los participantes se les dieron tareas de memoria mientras se sometian a una resonancia magnética funcional (fMRI). Los resultados revelaron que los que consumieron el extracto de té verde mostraron una mayor conectividad entre el parietal y la corteza frontal del cerebro y en última instancia, obtuvieron mejores resultados en las pruebas.
CAMINANDO Y ESTIRANDO
Durante décadas, los investigadores han estado descubriendo evidencias de la relación positiva entre el ejercicio físico y el rendimiento cognitivo. De hecho, hay una serie de estudios que han demostrado cómo el ejercicio ayuda al cerebro a resistir la contracción física y mejorar la flexibilidad cognitiva. Otros estudios también llegaron a la conclusión de que las personas que hacen ejercicio tienen cerebros sanos y obtienen mejores resultados en las pruebas cognitivas que los que son sedentarias.
Pero si tú no tienes tiempo para incorporar la actividad física en tu rutina regular ¿esto significa que estás en una seria desventaja? No necesariamente. Los neurólogos han descubierto que incluso el ejercicio moderado como caminar durante 40 minutos tres veces a la semana, puede mejorar la conectividad de los circuitos cerebrales disminuyendo el deterioro de la función cerebral debido al envejecimiento e incluso aumentar las habilidades cognitivas.
También se ha encontrado que los estiramientos tienen efectos positivos sobre la capacidad intelectual. En un estudio, la mitad de los participantes añadieron estiramientos y tonificación a su rutina semanal pero no cambiaron nada más en sus estilos de vida y la otra mitad añadieron actividad aeróbica moderada a su rutina. La actividad aeróbica impulsó el cerebro con más eficacia que los estiramientos y tonificación, lo cual no fue una sorpresa, dados los beneficios ya documentados del ejercicio pero los que sólo hicieron estiramientos y tonificación tenían mejores resultados en las pruebas de rendimiento cognitivo después de un año en el estudio de lo que tuvo en su inicio.
ALIMENTOS QUE DAN IMPULSO A TU CEREBRO
La relación entre la dieta y la función cerebral ha sido bien documentada. Por ejemplo, la investigación ha demostrado que los niños que consumieron el desayuno antes de ir a la escuela mostraron mejores habilidades de memoria y adquisición durante el aprendizaje. Otro estudio encontró que las personas que mantienen hábitos dietéticos sanos tenían un menor riesgo de deterioro cognitivo a medida que envejecían.
Sin embargo, comer una dieta sana y equilibrada es sólo parte de la ecuación. Hay algunos alimentos que se ha demostrado que ayudan a mejorar la función cerebral, a protegerse contra el deterioro cognitivo asociado a la edad y a fomentar la concentración y la claridad.
Las nueces, por ejemplo, son una rica fuente de magnesio, un mineral que se ha relacionado con mejoras en la memoria a corto y largo plazo.
- El brócoli, que es totalmente vitamina K, es conocido para mejorar el rendimiento cognitivo y la capacidad intelectual.
- Las semillas de calabaza proporcionan a tu cuerpo zinc, que es fundamental para mejorar la memoria y habilidades de pensamiento.
- Los arándanos contienen antocianinas, antioxidantes compatibles con la comunicación neurona a neurona en el cerebro y pueden ayudar a prevenir la pérdida de memoria.
- El chocolate negro se ha demostrado que aumenta las características cerebrales de atención y concentración.
- Verduras de hoja verde, espárragos, aceitunas y granos enteros también están llenos de vitamina E que es probable que ayude a prevenir el deterioro cognitivo especialmente en las personas mayores
Mediante la incorporación de estos super alimentos en tu régimen alimenticio, puedes mejorar la capacidad intelectual del cerebro que con otras estrategias no podrías.
MÚSICA PARA LA MENTE
Escuchamos música cuando hacemos ejercicio ya que energiza y se involucra en nuestros cuerpos. Escuchamos música cuando queremos descansar ya que suaviza y calma. Pero ¿hay que escuchar música cuando queremos crear un cambio real en nuestra función cerebral?
En un estudio de 2011, 40 pacientes antes de una operación fueron asignados bien a un grupo en el que escucharon música instrumental o bien en un grupo de control en el que escucharon un placebo no musical. Ambos grupos escucharon sus respectivos estímulos de audio durante aproximadamente dos horas antes, durante y después de sus operaciones. Los investigadores encontraron que durante el proceso quirúrgico, los pacientes en el grupo de música mostrarón un menor consumo de propofol y tenían niveles más bajos de cortisol que el grupo control.
Los niveles de cortisol son importantes porque los neurólogos han descubierto que el estrés crónico y el cortisol pueden desencadenar cambios a largo plazo en la estructura y función del cerebro. En una serie de experimentos, la profesora asociada de la Universidad de Berkeley de biología integrativa, Daniela Kaufer y sus colegas, encontraron que el estrés crónico y los niveles elevados de cortisol pueden conducir a la sobreproducción de células productoras de mielina y menos neuronas de lo normal.
La música clásica, en concreto, también se ha demostrado que ayuda en el desarrollo de mejores niveles de concentración. Apenas el año pasado, un estudio de la Universidad de Instituto de Educación de Londres encontró que la exposición de los niños a una variedad de música clásica los llevó a tener habilidades de escucha mejoradas y a desarrollar una mayor concentración y autodisciplina. Un estudio similar de la Universidad de Dayton encontró que los estudiantes tuvieron un mejor desempeño en el procesamiento espacial y lingüístico cuando Mozart estaba sonando de fondo.
¡Vive con Pasión!
Tony Robbins
Interesante artículo verdad, como bien dice Tony, por suerte el cerebro es un órgano que se puede entrenar, alimentar y lo mejor no importa la edad que tengas, siempre será buen momento para fortalecerlo y tenerlo a nuestro favor, solo necesitamos realizar los pasos correctos y cambiar de actitud. En este enlace también te damos más tips para fortalecer nuestro cerebro y estar más saludables.
Finalmente, estos cambios serán posibles solo si te pones en acción. Tú decides ahora y no más olvidos.
Esperamos tus comentarios, asimismo sugerencias para tratar temas que sean útiles para mejorar tu vida.
Un abrazo desde este lado de la mágica bruma.
Tus amigas de,
PARA TI MUJER HOY